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Más problemas para el Compostela

Sigue sin haber acuerdo por el finiquito de Iñaki Alonso. El técnico vasco, que ha dejado la negociación en manos de sus representantes, no quiere perdonar nada del contrato firmado con la SD Compostela, lo que supone una cantidad muy elevada a abonar por el club,  y que  no parece dispuesto a asumir en su totalidad. De hecho, el departamento jurídico compostelanista ha pasado ya al estudio del clausulado de dicho contrato en busca de alguna estipulación que permita aligerar el montante económico a desembolsar.

El problema es que el tiempo juega en contra de la SD. Aquí han surgido muchas dudas que, con la normativa en la mano, trataré de resolver. Lo que el Reglamento de la RFEF establece en su artículo 160.1 es que "Si se produjera la vacante del entrenador una vez comenzada la competición, el club estará obligado a contratar otro, debidamente titulado para la categoría en que milite, en un plazo máximo de dos semanas" y en el 163.1 que "No se tramitará licencia de entrenador alguno al club que, habiéndola solicitado, no haya satisfecho o garantizado la totalidad de las cantidades que, en su caso, adeudara al entrenador o entrenadores anteriores"
Conclusión: que el Compos, mientras no llegue a un acuerdo con Iñaki para resolver su contrato, o al menos preste una fianza por la cantidad  reclamada hasta que se resuelva la cuestión, no puede inscribir a un nuevo entrenador. Y  no inscribir un entrenador en el plazo de dos semanas, supondría ser sancionado por parte de la Federación Española de Fútbol.

Por último, también se están plantenado dudas de si puede Alberto Mariano sentarse en el banquillo este sábado frente al Celta B. La normativa dispone que "No se diligenciará licencia de segundo entrenador o entrenadores ayudantes si el equipo en cuestión no tuviera inscrito primer entrenador." Así pues, si el club no puede tramitar la licencia de un nuevo entrenador, ni de un ayudante si no hay primer entrenador, hoy por hoy, con el reglamento en la mano, al menos bajo mi interpretación, la única forma en la que podría dirigir al equipo Alberto desde el banquillo es como ayudante de un Iñaki Alonso que según el reglamento, salvo fuerza mayor, también tendría que sentarse con él. Completamente surrealista.

Esta situación ya la vivió el Compos en la temporada 2009-2010, en la que tras el cese de Chus Baleato, Fabiano tuvo que, durante varias jornadas, dar órdenes al preparador con una habilitación de periodista a pie de campo. Ahora bien, por lo ocurrido entonces, y por el estudio del reglamento, lo que entiendo es que sí cabe la posibilidad de que cualquier miembro del actual cuerpo técnico pueda dirigir al equipo de manera oficiosa, pues no pierde el derecho a sentarse en el banquillo por haber sido cesado el primer entrenador. Aunque en cualquier caso, el club se vería expuesto a ser multado si no arreglara la situación en un plazo de dos semanas.

Por último, aquí os dejo por si os interesa una extensa entrevista realizada a Iñaki Alonso este miércoles en Radio Obradoiro: