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UD Logroñés 3-3 SD Compostela

El Compostela tiró por la borda una victoria cantada con un minuto desastroso 
Alineación: Marqueta, Catú, Portela, Alcañiz, Jimmy, Marcos, Jordan, Manu, Fondevila (Iván Pérez), Quim Araújo (Yacine) y  Mensha (Teles)

Difícil de explicar lo de hoy. Si hay un adjetivo que pueda definir este partido, podría ser el de loco, kafkiano, o surrealista. La victoria estuvo increíblemente cerca, y uno todavía no se explica como el partido pudo acabar en empate.

El encuentro comenzó bien para los nuestros. Jimmy adelantaba al Compostela aprovechando un rechace en un saque de esquina y el Logroñés se quedaba con diez jugadores pocos minutos después por una expulsión que probablemente no era. El partido se ponía cuesta abajo pero poco después el árbitro expulsaba a Jimmy, más por compensación que por justicia. Y en esa misma falta, empataban los riojanos.
Para colmo, posteriormente el colegiado señalaba penalti favorable a los locales y expulsaba a Alcañiz por doble amarilla. El panorama no se podía poner más negro. Pero afortunadamente, Camochu lanzó fuera el penalti y el árbitro rectificaba su expulsión, puesto que la falta la había cometido Portela, y no Alcañiz.

El encuentro volvía a dar otro gran vuelco y el Compostela volvía a ponerse por delante en el marcador, gracias a un gol de Mensha. Con este tanto del nigeriano el Compos se marchaba vencedor al descanso.

En la segunda mitad el Logroñés fue poco a poco haciéndose con el partido en busca del tanto de la igualada mientras la SD buscaba sorprender a la contra. El equipo resistía como podía hasta que parecía que el sufrimiento por fin iba a terminarse, con un penalti a favor que Jordan transformaba haciendo el 1-3. Minuto 83, el Compos con ventaja de dos goles, todo parecía hecho. Eso es lo que debió pensar todo el equipo y sobre todo la defensa, porque increíblemente se dejaron remontar en tan sólo un minuto. El el 88' Miguel Santos recortaba diferencias y en el 89' Ubis ponía las tablas tras una pérdida de balón en mediocampo.
Y con ese 3-3 terminaba el partido. Tan difícil de asimilar como cierto.

Un empate que deja un sabor muy amargo, y que moralmente es una derrota. De nada sirve hacer 87 minutos magníficos si vas a desperdiciarlo todo en un minuto. Hay que ser un equipo desde el minuto uno hasta que pita el árbitro, sin excepción. Hoy se ha perdido una gran oportunidad de acercarnos a los puestos de ascenso que veremos si se vuelve a repetir. Y ahora además toca el Racing de Ferrol, con serios problemas en defensa, Puesto que ni  Jimmy, ni Catú ni Alcañiz podrán ser de la partida, y además Cristian está todavía sin ficha.